Superado.
El momento de bajón, digo, lo otro ya lo solucionaré poco a poco.
Sigo un poco a vueltas con mi pequeña lesión.
Digo pequeña porque no hay nada roto todavía, y porque se que entre los que me leéis algunos tenéis cosas bastante mas serias.
Pero es lesión al fin y al cabo, porque no me deja entrenar como me gustaría. Y porque duele.
Desde hace unos tres meses estoy metido en averiguaciones, a ver si me entero de qué pasa.
El problema es que la ciencia adelanta que es una barbaridad, y no se puede pedir a los distintos especialistas (traumatólogos, podólogos, fisios..), que sepan de todo, así que cada cual me da su particular visión del problema.
Trasladado a la Crisis de la Economía, es como si un sindicalista solo detectara un aumento de los EREs, y de la precariedad laboral. Un macroeconomista, la contracción de la demanda. Un banquero, el aumento vertiginoso de la mora. Los técnicos de la política, cambios de opinión entre los electores.
Y al ciudadano de a pié es al que le duele todo, pero no sabe muy bien como solucionarlo.
Así que acumulo información y buenos consejos de todas las áreas. Porque de nada me sirve empezar a entrenar así y romperme de buenas a primeras. Y la verdad es que estoy mucho mejor.
El otro día leí esto:
Fatiga de los Materiales: Básicamente consiste en la ruptura de un material
tras aplicarle un pequeño esfuerzo, muy inferior a su tensión máxima de rotura.
En realidad, este último tirón es la clásica gota de colma el vaso.
Para que se produzca la rotura, el material ha sufrido anteriormente gran cantidad de esfuerzos de forma cíclica.
El contexto es la historia del Haviland Comet , bellísimo y revolucionario avión, prodigio de la ingeniería, que tras dos años de brillante servicio, comenzó a tener accidentes uno detrás de otro.
Este aparato era pionero en muchos aspectos, quizás demasiados, por eso costó bastante encontrar el problema.
Finalmente descubrieron que sus originales "ventanas cuadradas", generaban demasiadas tensiones en el fuselaje cercano a las mismas, lo que acababa produciendo grietas, descompresión y las trágicas consecuencias que lo jubilaron anticipadamente para siempre.
El aparato resultante de toda esta investigación, ya con ventanas redondas, nunca recuperó la confianza y fue un desastre comercial, a pesar de ser un avión sobresaliente.
Sin embargo yo, con todos los consejos que estoy aplicando, creo que pronto estaré volando de nuevo.
El vuelo inagural tendrá por destino Elche, dentro de tres meses, y tan seguro estoy de mis Ingenieros, que aun siendo el primero del año, será un vuelo de larga distancia.
Entre nosotros, trataré de hacer pequeños vuelos de prueba antes.