¿El Cambio horario?

Brevemente.
Cuelgo foto mía cuando trataba de empezar a nadar esta mañana en la piscina.
Como puede verse estoy fatal. He entrenado bastante esta semana pasada, pero me he quedado totalmente vacío. Además la alergia comienza a fastidiarme un poco, salida con copas el sábado, y de remate, hemos cambiado la hora este fin de semana.

Estoy que me arrastro. Me duermo por los rincones.
Y como estoy cansado, me afecta al humor y estoy un poco negativo.Uno de los pensamientos que mas me desaniman es el siguiente razonamiento lógico.
- Si el viernes nadé unos 2.400m.
- El sábado corrí 1 hora,
- y el domingo hice unos 65 km con la bici,
Y hoy estoy muerto, y me duele un lado de la cadera.

Cuando dentro de cuatro semanas en Elche trate de hacer todo eso y un poco mas, en unas 6 horas, ¿¿qué va a pasar??

Por cierto, que es normal que me duela un poco la rodilla y la cadera, porque según he comprobado, la última vez que corrí en un entrenamiento 1 hora seguida fue el 15 de septiembre del 2008 (después vendría el Titán que lo acabé paseando, claro).

Adoro la primavera.

PD. Al menos me quedo con que llevo 2 semanas seguidas superando las 6 horas semanales

Probando, probando....

Una buena semana de entrenamientos.
La he terminado el sábado con una visita a la Sierra de Cádiz, para hacer algo mas de 3 horas y media con los compañeros del club. Básicamente subir Las Palomas, ir a El Bosque y subir el Boyar y Las Palomas de nuevo.

La verdad es que no estoy aun como para esas cosas, pero sentía que necesitaba pegarme un buen tute, exprimirme y ponerme a prueba. A ver si es verdad, que la rodilla está bien por fin.

Y la verdad es que ha salido todo muy bien. Con prudencia y despacio, pero hasta el final. Si no cuento mal la cuarta vez que vengo a la zona, y la que mejor he subido. Creo que la clave ha estado en que he bebido y comido mucho. Mucha agua, barritas, algún gel...

Pasaba sucesivamente por las rampas que me habían hecho otras veces parar o arrastrarme hasta la siguiente curva preguntándome cuanto mas aguantaría, o directamente doblarme en la cuneta y echar los higadillos con el estómago del revés.
Esta vez pasaba por todos esos lugares, y los miraba con media sonrisa seguro de poder esta vez. Incluso, me permitía disfrutar del paisaje, y de los buitres que pasaban planeando realmente cerca.
La paliza ha sido considerable pero la necesitaba. Necesitaba probarme.

Después de practicamente 4 h con las pulsaciones por las nubes, no llegaba a Sevilla sin echarme a la boca algo.Una Venta de carretera, desprovista del mas mínimo adorno o floritura, pero que tenía justo lo que necesitaba:

Una buena parrilla, quien supiera manejar en ellas las carnes y este solomillo de buey que casi hizo que se me saltaran las lágrimas de emoción.

Cuando 2 minutos después de servirlo, llamé al camarero, me preguntó distraido:

- ¿Sí? ¿Qué desea? ¿Le falta algo?

- No nada. Que ya he acabado. ¿Qué hay de postre? (Me habría tomado otro solomillo)

Miraba el plato asustado sin creérselo del todo.

Hay placeres que no tienen precio.

Comerse un buen plato cuando se tiene mucha hambre y darse una buena ducha después de un entrenamiento como el del sábado, son buenos ejemplos.

Curioso mundo de Internet.

Dos curiosidades.

1. El Facebook. Me han incorporado casi a rastras. No me gusta.
Pero lo cierto es que me ha permitido contactar con varos amigos que han ido llegando uno detrás de otro enganchados por enlaces virtuales.

He estado en fin de semana en Madrid aprovechando para ver a alguno de ellos.
Y he tenido la oportunidad de ver a una amiga. Ni la palabra gran, ni la palabra vieja, combinan bien con la palabra amiga, pero realmente es una gran amiga sin ser grande, y una vieja amiga, sin que ninguno de los dos seamos viejos.
María y yo solo pudimos verla un rato a su trabajo, pero estuvo bien, y dio tiempo a rememorar un par de capítulos y a una rapidísima puesta al día en el tiempo que pudimos robarle ya que
un programa de radio en directo no deja que abandones por mucho tiempo tu puesto de trabajo.

Hacía, no se, 7 u 8 años que no la veía. Los mismos años que hace que no veo a ninguno de mis amigos de aquellos buenos tiempos. ¡Que buenos se vuelven los tiempos cuando se miran desde la distancia!.


Por lo demás: Conseguido el objetivo de pasarlo muy bien, con cenas, salidas nocturnas, y nada nada de entrenar.
Creo que es justo lo que mi cuerpo me estaba pidiendo.


2. De vuelta a la rutina casera de hoy, consulto el correo, y los Blogs y.... he leído hoy en la web de la Federación Española, que Eva Ledesma, inaguraba web, así que he visitado la dirección para comprobar que se une a nuestro prestigioso grupo de triatletas con blog.
Cuando veía los objetivos para este año de la triatleta leridana, justo al lado he visto colgado en la sección “videos” una imagen de un tipo con pinta de globero y muchos pelos en las piernas y cuando he mirado bien.... ¡Tomá! ¡Si soy yo!!

Acostumbrado que está uno a no compartir con los triatletas "ELITE" mas que la lista de inscritos y si acaso, unos cortos instantes en la Línea de Salida, me ha resultado bastante raro ver colgado en la sección de vídeos, este experimento (única chapuza audiovisual por mi parte hasta la fecha), que me apañé con las fotos que me hizo mi cuñado en elTriatlón de Vitoria, Triatlón que Eva Ledesma ganó a toda una Virginia Berasategui.

Lo había olvidado, pero Youtube no olvida. Ha sido divertido.

Esta semana puede que con la bici, suba tres peldaños de golpe en mi plan de entrenamiento. Espero no caerme de boca.

Estrenos de cartelera.

Por ausencia de nuestro crítico de cine Davidiego, brillante finisher del Ironman de Nueva Zelanda, asumo de manera excepcional el comentario de uno de los últimos estrenos de la cartelera.

Se trata de Watchmen.

Bien ambientada, y extraordinariamente fiel al comic, cuenta la historia de una serie de héroes jubilados. Uno de ellos, es asesinado por alguien de la liga anti tabaco, que entra por sorpresa en su piso y le mete una paliza de espanto.

Esto mueve a uno de los héroes, el único que queda que no se ha jubilado, a investigar y preguntar por ahí, y al tiempo que se nos cuentan sus indagaciones, se nos relata la historia de cada uno de estos héroes, con vidas llenas de problemas personales, como cualquier otro mortal.

Así por ejemplo, el mas extraordinario de ellos, el Dr. Manhatan, tiene graves problemas matrimoniales, porque es un adicto al trabajo y al Manhatan con Blue Tropic y no le echa cuenta a su Sra esposa.
Discuten y la manda a paseo, y el Doctor de mal en peor, todo el dia borracho se monta unas paranoias existenciales del copón. Además en plan rollo desgarrado de: os odio a todos, sois unos malos amigos y la humanidad me importa un bledo.

Como el tío este es Mecánico Jefe en la industria militar, y la Defensa del país depende en parte de él, al final su mujer, tiene que hacer de tripas corazón por su País y por la Humanidad y tratar de reconciliarse.

Como además de soso, sieso y azul, tiene menos detalles que un Seat Panda, lo mas romántico que se le ocurre a este señor es llevársela a hacer nudismo a Marte.

No desvelaré el final, pero estos héroes jubilados con sus penas, traumas y humanas debilidades, deben sacar las castañas del fuego a un Mundo al borde de la destrucción total.
Como en la vida misma, los jubilados tienen mucho que decir, aunque a veces no se les escuche.

Para el recuerdo grandes escenas como cuando el Dr Manhattan después de muerto se reencarna en una especie de Dios Apolo azul, sin rastro alguno de su anterior naturaleza, irreconocible para todos, en pelotas en mitad de un comedor ante el estupor general.
Y su novia le mira el cacharro y dice: ¿John?...

Fiel al comic, se empeña en contar cosas que en las viñetas solo se sugiere, por lo que reaulta a veces demasiado recargada, especialmente de cuestiones existenciales y morales.
No se hace lenta pese a sus 2,5 h, y es entretenida. A quien le gusten los salpicones de kepchup y las fracturas de todo tipo, las hay en abundancia.

Ni galgo ni podenco.

El domingo le robé a un día establecido por los pronósticos como de lluvia, dos horitas de bici a buen ritmo. Con un ojo vigilando los nubarrones, y otro las tapas de alcantarillas que las andaban cambiando.

Los que me conocen, saben que me gustan muchos todos los animales. Sobre todo los perros.

A veces digo en broma que prefiero los perros a las personas.
A veces lo digo en serio.

Explico esto para que no creais que tengo ni miedo ni asco, ni albergo ningún mal sentimiento ni animosidad contra estos magníficos animales.
Ahora es cuando enlazo todas estas razones y justificaciones previas, con el final de entrenamiento del domingo.

Pues es que volviendo ya a casita, satisfecho apretaba botoncitos del cuenta Kms, y calculaba como era de buena mi sesión, con las piernas ya bien machacadas.
Es entonces, que me cruzo con un grupito de perros asilvestrados de los mas diversos tamaños, y aspectos. Permanecen en perezosa reunión junto a la cuneta de la carretera, con aire de domingueros aburridos.
Pero entre ellos hay uno, el mas grande, un Pointer diría yo.
Está en envidiable forma, tiene un aspecto magnífico, e inicia una rápida carrera. Seguro es porque esta harto de este domingo absurdo y gris sin hacer nada. Seguro que es porque necesita quemar toda esa energía, liberar tensión, y sentir un poco de la adrenalina de la competición. Quizás tiene alma de triatleta.

Al principio miro divertido su persecución. Ya sabéis: me encantan los perros.
Durante unos segundos me hace gracia.Hasta que comienza a correr a mi lado, a gruñir, y a buscar el contacto, a buscar mi pierna, y a la rueda delantera.Aquí la verdad es que empiezo a acojonarme de que me tire y/o muerda.

De internet: El Pointer es un excelente perro cazador. Es un gran rastreador, y no hay nada que pueda distraerlo de su objetivo ni tampoco se fatiga por la distancia que tenga que recorrer para alcanzarlo.

Doy Fe.
Me aguantó mas de 300 m, cerca de los 40 km/h (el viento nunca es a favor cuando te persiguen), antes de comenzar a sacar la lengua, y finalmente dejarme ir, con mis piernas reventadas, y las pulsaciones a mil.

Si Pablo Cabeza, leyera mi blog podría incluir esta modalidad entre sus especiales entrenamientos integrando los elementos de la naturaleza.

Espero no volver a encontrarmelo.
Deberíais esperar lo mismo, porque como siga entrenando la persecución con mi amigo, no vais a poder conmigo en ninguna competición.