Triatlón de Posadas, y desconcierto Tri-lero.
Nunca he tenido problemas para querer entrenar.
Me gusta.
Algo ha pasado durante esta preparación para el IM.
He ido perdiendo fuelle. Quizás sea cansancio, no lo se, pero cada vez me cuesta mas ir a hacer el entrenamiento del día.
Esas sesiones que no apetecen, y se hacen duras, siempre han estado ahí, pero antes cuando las completaba estaba satisfecho por haber cumplido con el plan.
Sin embargo, ahora me vuelvo cansado a casa con la sensación de quien hubiese sido sometido a trabajos forzados por algún malvado dueño.
Me cuesta encontrar la motivación para entrenar.
Pensé en verme este fin de semana alguno de esos videos “motivantes” que circulan por internet, o el video de algún Ironman, o cosas así.
También este fin de semana tenía mi última prueba antes del día D. El triatlón de Posadas, clasificatorio para el campeonato de España. Todo un triatlón Olímpico.
Me dije a mi mismo, que un poco de ambiente "triatlonero", era lo que me hacía falta para tomar un poco de impulso y motivación para este último mes.
Pero al final más que triatlonero, mi estado de ánimo es Tri-lero.
Ando perdido buscando esa motivación, como si me la hubiera escondido un trilero.
Seré mas claro: No entiendo que pasa, porque hasta donde yo recuerdo:
Yo juego a esto, porque me divierte. Hago triatlón, porque me gusta.
Encuentro placer en entrenar a diario.
Me produce satisfacción atravesar la línea de Meta de los Tris y me da igual hacerlo de los últimos.
El Ironman era un sueño que no me atrevía a soñar hasta ahora, y sin embargo es un camino recorrido ya al 80%.
Me preocupa tener que escribir estas razones para recordármelas.
................................................................................................
Me voy a referir al Triatlón de Posadas.
Brevemente.
Ha sido seguramente el triatlón olímpico mas duro que he hecho.
Muchísimo calor, y un recorrido de bici durísimo.
El Califas de Hierro, que así se llama el Triatlón de Posadas, es una de las mejores pruebas de siempre. Este es mi tercer Califas.
Este año ha sido un borrón en su historia, porque la organización como clasificatorio de campeonato de España, ha acabado convirtiéndolo en un desastre. No voy a dar muchos detalles por no hacer leña del árbol caído, pero lograron que acabara la prueba enfadado.
Los horarios eran tremendos, muchas salidas sucesivas de cada grupo de edad.
Y tres horas peleándonos por la sombra de los árboles como si fuéramos un rebaño de ovejas. Así estuvimos esperando nuestra salida. Tres horas al sol, bebiéndonos el agua de los bidones de la bici.
Hasta el agua del embalse estaba desconocida este año en Hornachuelos. Normalmente sobre 15º, y esta vez pasé hasta calor nadando con el neopreno.
En mi rosario de tonterías particulares, me dejé en casa entre otras cosas lo que tomo para el asma, así que salí del agua como si me hubiera tragado un árbitro de los que pitan los goles fantasma.
Digo entre otras cosas, porque:
- También me dejé en casa, unas chanclas (todo el tiempo descalzo tras preparar la T2),
- También una de las dos maravillosas plantillas correctoras de la pisada y tengo dos pies (corrí sin plantillas en las zapas).
- Un protector estomacal (cuando crucé la meta eché hasta la primera papilla).
El recorrido de bici durísimo, y peligroso, porque era un camino de cabras, parcheado de mala manera con gravilla, que se jugaba uno el físico o la integridad de la bici, si bajaba demasiado rápido. Un circuito para BTT, este año.
El segundo avituallamiento se acabó en mitad de la prueba., y tuve que hacer mas de 20 km de bici, bebiendo solo un resto de isotónica calentorra que me quedaba y a sorbitos pequeños.
Todo esto con un calor de espanto (treinta y bastantes). Posadas está a solo unos pocos kms de Écija, conocida como la sartén de Andalucía.
La gente de Posadas como siempre muy bien, pero claro, después de 5 o 6 horas de ver pasar Grupo de Edad, tras Grupo, bastantes se aburrieron, y se metieron en casa.
En conclusión. Si siguen así: Mal.
Nunca he tenido problemas para querer entrenar.
Me gusta.
Algo ha pasado durante esta preparación para el IM.
He ido perdiendo fuelle. Quizás sea cansancio, no lo se, pero cada vez me cuesta mas ir a hacer el entrenamiento del día.
Esas sesiones que no apetecen, y se hacen duras, siempre han estado ahí, pero antes cuando las completaba estaba satisfecho por haber cumplido con el plan.
Sin embargo, ahora me vuelvo cansado a casa con la sensación de quien hubiese sido sometido a trabajos forzados por algún malvado dueño.
Me cuesta encontrar la motivación para entrenar.
Pensé en verme este fin de semana alguno de esos videos “motivantes” que circulan por internet, o el video de algún Ironman, o cosas así.
También este fin de semana tenía mi última prueba antes del día D. El triatlón de Posadas, clasificatorio para el campeonato de España. Todo un triatlón Olímpico.
Me dije a mi mismo, que un poco de ambiente "triatlonero", era lo que me hacía falta para tomar un poco de impulso y motivación para este último mes.
Pero al final más que triatlonero, mi estado de ánimo es Tri-lero.
Ando perdido buscando esa motivación, como si me la hubiera escondido un trilero.
Seré mas claro: No entiendo que pasa, porque hasta donde yo recuerdo:
Yo juego a esto, porque me divierte. Hago triatlón, porque me gusta.
Encuentro placer en entrenar a diario.
Me produce satisfacción atravesar la línea de Meta de los Tris y me da igual hacerlo de los últimos.
El Ironman era un sueño que no me atrevía a soñar hasta ahora, y sin embargo es un camino recorrido ya al 80%.
Me preocupa tener que escribir estas razones para recordármelas.
................................................................................................
Me voy a referir al Triatlón de Posadas.
Brevemente.
Ha sido seguramente el triatlón olímpico mas duro que he hecho.
Muchísimo calor, y un recorrido de bici durísimo.
El Califas de Hierro, que así se llama el Triatlón de Posadas, es una de las mejores pruebas de siempre. Este es mi tercer Califas.
Este año ha sido un borrón en su historia, porque la organización como clasificatorio de campeonato de España, ha acabado convirtiéndolo en un desastre. No voy a dar muchos detalles por no hacer leña del árbol caído, pero lograron que acabara la prueba enfadado.
Los horarios eran tremendos, muchas salidas sucesivas de cada grupo de edad.
Y tres horas peleándonos por la sombra de los árboles como si fuéramos un rebaño de ovejas. Así estuvimos esperando nuestra salida. Tres horas al sol, bebiéndonos el agua de los bidones de la bici.
Hasta el agua del embalse estaba desconocida este año en Hornachuelos. Normalmente sobre 15º, y esta vez pasé hasta calor nadando con el neopreno.
En mi rosario de tonterías particulares, me dejé en casa entre otras cosas lo que tomo para el asma, así que salí del agua como si me hubiera tragado un árbitro de los que pitan los goles fantasma.
Digo entre otras cosas, porque:
- También me dejé en casa, unas chanclas (todo el tiempo descalzo tras preparar la T2),
- También una de las dos maravillosas plantillas correctoras de la pisada y tengo dos pies (corrí sin plantillas en las zapas).
- Un protector estomacal (cuando crucé la meta eché hasta la primera papilla).
El recorrido de bici durísimo, y peligroso, porque era un camino de cabras, parcheado de mala manera con gravilla, que se jugaba uno el físico o la integridad de la bici, si bajaba demasiado rápido. Un circuito para BTT, este año.
El segundo avituallamiento se acabó en mitad de la prueba., y tuve que hacer mas de 20 km de bici, bebiendo solo un resto de isotónica calentorra que me quedaba y a sorbitos pequeños.
Todo esto con un calor de espanto (treinta y bastantes). Posadas está a solo unos pocos kms de Écija, conocida como la sartén de Andalucía.
La gente de Posadas como siempre muy bien, pero claro, después de 5 o 6 horas de ver pasar Grupo de Edad, tras Grupo, bastantes se aburrieron, y se metieron en casa.
En conclusión. Si siguen así: Mal.
Pero si retoman la senda que han perdido, el Califas de Hierro, volverá a ser de mis pruebas favoritas.
El Califas ha de reencontrarse.
Y yo también.
El Califas ha de reencontrarse.
Y yo también.