Objetido cumplido. Mi primera Maratón.
No me engañaron los que me dijeron que tardaría en olvidar este día.
Estoy seguro que el recuerdo llegará mucho mas lejos que el dolor de piernas, que a estas horas remite.
Después de dejar bien casado a mi amigo Mariano en su propia boda, el día anterior, me dirijí a casa para dormir unas 7 horas.
Llegué al Estadio media hora antes de la prueba, y aparqué el coche donde primero pillé. Luego me acordaría de ello, al buscarlo renqueante cargado con mis cosas, y mis kilómetros.
Larga espera en la cola de los servicios, antes de la Salida. Claro, tanto hidratarse, tanto hidratarse....
Corro a la salida, y respiro un poco del ambiente dentro del Estadio Olímpico, unos dos minutos antes de salir.
Al fin saliendo, impresionante el momento en que expontaneamente la marea humana atravesando el oscuro túnel de salida, descargan algo de su adrenalina, gritando como una especie de guerreros de película. El eco del túnel multiplica el griterío.
Primer momento de carne de gallina.
Salimos del Estadio Olímpico.
Los primeros Kilómetros los hago suaves, muy suaves, me deslizo, acaricio el asfalto con mis suelas. No desgastarse: esa es la premisa.
Corro unos 300 m detrás del globo del corredor que va a 4 h, y me acercaría a él muy poco a poco, sin llegar a pasarle hasta el Km 15.
Acompaño a un trío que comanda un veterano, y que llevan un ritmo que me parece muy apropiado para mí (Son del Club de Atletismo Espiel).
De todos modos vigilo mucho el cronómetro y el pulsómetro para no pasarme.
Y así llego a la media maratón, fresco, pero con un promedio cercano a las 4h. (1h 57m)
Decido que puedo empezar a ir más rápido, y mi trío del club Espiel, deciden lo mismo, así que durante los siguientes 10 Km, nos hacemos relevos de vez en cuando.
Llego al Km 29 con buenas sensaciones, y veo allí a mi compañero Miguel (del club), que me anima, y es increible como responden las piernas a los ánimos de la gente. Realmente te empujan.
Desde el 30 empiezo la escalada de sufrimiento y alterno los Kilómetros con sonrisa en la cara, y chocando las manos de los niños que animan, con momentos en los que me vengo algo abajo, pero sin dejar de mantener el ritmo.
A partir del Km 37, mi penúltima sonrisa, y mi último "chócala". El dolor de las piernas crece, y la zancada se vuelve corta. No puedo hacer nada.
Aun así, paso corredores sin parar, paso atletas andando, estirando en los bordillos, paso ambulancias con corredores, y nubes de reflex. Y yo sigo corriendo.
Desde ese kilómetro 37, los puntos kilométricos, tardan mas y mas en llegar. Cada vez mas largos los kilómetros, y mas corta mi zancada.
Mi pulso desciende. Me voy parando como un reloj sin pila, poco a poco.
Km 40. Debería pensar que la cosa está hecha. ¿que son 10-15 minutos mas?.
Pero no. Me paro un momento a beber bebida isotónica, andando, bueno, haciendo eses.
No pares, no sigas parado, pienso, o no podrás volver a correr.
Arranco. Dolor otra vez.
Empiezo entonces a discutir conmigo mismo. Me digo que todo es una ilusión, que el sufrimiento no existe, que si llevo mas de 3 horas, no puedo estar ahora mucho peor que hace 20 minutos.
Lo que me hace sufrir es pensar en que pronto podré parar. Y desearlo.
Debo eliminar ese pensamiento, ese deseo, pensar en correr para siempre. Resignarme al dolor y el agotamiento, y seguir, seguir, seguir....
La gente me grita que ya está, que lo he hecho, que el Estadio está ahí, y aunque lo veo, no les creo porque hace tiempo que me gritan que "está ya hecho".
No les creo.
Hormigueo en las manos, se me duermen. Cierro los puños para no sentirlo.
Un atleta camina haciendo eses delante mía. Se va a derrumbar. Le ayudan a sentarse. No puede seguir. Km 41.
El Estadio. Estoy entrando por el túnel Sur del Estadio. La luz del sol me deja al entrar en él, pero mi cerebro tiene un amago de continuar apagándome la luz y dejarme ciego. Por poco dejo de ver.
El final del túnel. Estoy dentro del Estadio Olímpico. Un milagro: el dolor desaparece, y corro por el tartán cada vez mas feliz, con mi zancada corta, y mi hormigueo bien apretado en los puños.
Veo la grada de meta. La recta. Y oigo mi nombre gritado por compañeros del club desde la grada, y esto se me hace realmente emocionante.
Cruzo la meta, feliz. Y descubro que la sonrisa de las fotos de finisher, no son para salir guapo en la foto.
Esas sonrisas salen del alma, porque yo tengo una igual, una que no me cabe en la cara.
Junto a mi, un señor normal, de los que eran solo "gente" ayer y lo serán de nuevo mañana, se echa a llorar al entrar en la meta.
Objetivo cumplido. Mi primera Maratón. Y además, aunque sea lo de menos, bajando de 4 h.
Tiempo real 3h 54m 50 seg, Tiempo Maratón 3 h 56 m.
Estoy Feliz. Pondré fotos, cuando vaya teniendo.
No me engañaron los que me dijeron que tardaría en olvidar este día.
Estoy seguro que el recuerdo llegará mucho mas lejos que el dolor de piernas, que a estas horas remite.
Después de dejar bien casado a mi amigo Mariano en su propia boda, el día anterior, me dirijí a casa para dormir unas 7 horas.
Llegué al Estadio media hora antes de la prueba, y aparqué el coche donde primero pillé. Luego me acordaría de ello, al buscarlo renqueante cargado con mis cosas, y mis kilómetros.
Larga espera en la cola de los servicios, antes de la Salida. Claro, tanto hidratarse, tanto hidratarse....
Corro a la salida, y respiro un poco del ambiente dentro del Estadio Olímpico, unos dos minutos antes de salir.
Al fin saliendo, impresionante el momento en que expontaneamente la marea humana atravesando el oscuro túnel de salida, descargan algo de su adrenalina, gritando como una especie de guerreros de película. El eco del túnel multiplica el griterío.
Primer momento de carne de gallina.
Salimos del Estadio Olímpico.
Los primeros Kilómetros los hago suaves, muy suaves, me deslizo, acaricio el asfalto con mis suelas. No desgastarse: esa es la premisa.
Corro unos 300 m detrás del globo del corredor que va a 4 h, y me acercaría a él muy poco a poco, sin llegar a pasarle hasta el Km 15.
Acompaño a un trío que comanda un veterano, y que llevan un ritmo que me parece muy apropiado para mí (Son del Club de Atletismo Espiel).
De todos modos vigilo mucho el cronómetro y el pulsómetro para no pasarme.
Y así llego a la media maratón, fresco, pero con un promedio cercano a las 4h. (1h 57m)
Decido que puedo empezar a ir más rápido, y mi trío del club Espiel, deciden lo mismo, así que durante los siguientes 10 Km, nos hacemos relevos de vez en cuando.
Llego al Km 29 con buenas sensaciones, y veo allí a mi compañero Miguel (del club), que me anima, y es increible como responden las piernas a los ánimos de la gente. Realmente te empujan.
Desde el 30 empiezo la escalada de sufrimiento y alterno los Kilómetros con sonrisa en la cara, y chocando las manos de los niños que animan, con momentos en los que me vengo algo abajo, pero sin dejar de mantener el ritmo.
A partir del Km 37, mi penúltima sonrisa, y mi último "chócala". El dolor de las piernas crece, y la zancada se vuelve corta. No puedo hacer nada.
Aun así, paso corredores sin parar, paso atletas andando, estirando en los bordillos, paso ambulancias con corredores, y nubes de reflex. Y yo sigo corriendo.
Desde ese kilómetro 37, los puntos kilométricos, tardan mas y mas en llegar. Cada vez mas largos los kilómetros, y mas corta mi zancada.
Mi pulso desciende. Me voy parando como un reloj sin pila, poco a poco.
Km 40. Debería pensar que la cosa está hecha. ¿que son 10-15 minutos mas?.
Pero no. Me paro un momento a beber bebida isotónica, andando, bueno, haciendo eses.
No pares, no sigas parado, pienso, o no podrás volver a correr.
Arranco. Dolor otra vez.
Empiezo entonces a discutir conmigo mismo. Me digo que todo es una ilusión, que el sufrimiento no existe, que si llevo mas de 3 horas, no puedo estar ahora mucho peor que hace 20 minutos.
Lo que me hace sufrir es pensar en que pronto podré parar. Y desearlo.
Debo eliminar ese pensamiento, ese deseo, pensar en correr para siempre. Resignarme al dolor y el agotamiento, y seguir, seguir, seguir....
La gente me grita que ya está, que lo he hecho, que el Estadio está ahí, y aunque lo veo, no les creo porque hace tiempo que me gritan que "está ya hecho".
No les creo.
Hormigueo en las manos, se me duermen. Cierro los puños para no sentirlo.
Un atleta camina haciendo eses delante mía. Se va a derrumbar. Le ayudan a sentarse. No puede seguir. Km 41.
El Estadio. Estoy entrando por el túnel Sur del Estadio. La luz del sol me deja al entrar en él, pero mi cerebro tiene un amago de continuar apagándome la luz y dejarme ciego. Por poco dejo de ver.
El final del túnel. Estoy dentro del Estadio Olímpico. Un milagro: el dolor desaparece, y corro por el tartán cada vez mas feliz, con mi zancada corta, y mi hormigueo bien apretado en los puños.
Veo la grada de meta. La recta. Y oigo mi nombre gritado por compañeros del club desde la grada, y esto se me hace realmente emocionante.
Cruzo la meta, feliz. Y descubro que la sonrisa de las fotos de finisher, no son para salir guapo en la foto.
Esas sonrisas salen del alma, porque yo tengo una igual, una que no me cabe en la cara.
Junto a mi, un señor normal, de los que eran solo "gente" ayer y lo serán de nuevo mañana, se echa a llorar al entrar en la meta.
Objetivo cumplido. Mi primera Maratón. Y además, aunque sea lo de menos, bajando de 4 h.
Tiempo real 3h 54m 50 seg, Tiempo Maratón 3 h 56 m.
Estoy Feliz. Pondré fotos, cuando vaya teniendo.
17 comentarios:
FELICIDADES, cuanto me alegro CAMPEÓN, eres una MAKINAAAAAAA jejejejejejeje
Al final, obejetivo cumplido, sensaciones, por lo que he leido increibles y encima con muy buena marca, un tiempazo, ya eres un MARATONIANO jejejejejej felicidades ;)
¡Don Jesús! ¡Qué tío! Ya perteneces a esa estirpe especial. Lo bueno es que, en cualquier escenario vital, ya sabes los webos y la fuerza de voluntad que tienes para afrontar lo que sea. ¡Enhorabuena -qué envidia-!
Con dos cojones, no se puede decir de otra manera, enhorabuena campeón, ahora bien, esto que te voy a decir es tan verdad como la vida misma, te puedo asegurar que se sufre más en la "maratona" que en un ironman, tu mismo..... te atreves?
Si te hubieran hecho el control anti dopping, seguro q das positivo, positivo de ron con cola!!!! Q si q te vi en la boda beberte hasta las macetas..... Asi hasta yo hago 42 kms 195 metros...jajjaaj
Joer mozo!!!
Enhorabuena!!
Se me han puesto a mi los pelos de punta al leer tus lineas!
Qué subidón chiquillo!!!
Lo dicho, sigue así y enhorabuena de todo corazón!!
salu2
Sí señor, ¡¡¡FELICIDADES!!!
Menuda envidia me das...
felicidades por ese pedazo de maratón, y todo y las dificultades manteniendo la segunda mitad, que eso cuesta....
Muchas Gracias a todos por las felicitaciones. Sobre todo viniendo de unos máquinas como vosotros.
Urre, la verdad, es que lo que dices, he podido disfrutar mucho de la prueba, y solo lo he pasado realmente mal en los últimos Kilómetros.
Muchas gracias Ramón, la verdad es una gran sensación. Lo de Lisboa tiene que ser grande también. Espero que Urre y tú coontinueis bien para ese objetivo.
Stani, ¿Yo un Ironman?? Si tu lo dices te creo. Para el año que viene. Este voy a por 1/2 Ironman en octubre.
Muchas gracias, Tus consejos, han sido eeh ....inspiradores. Lo único que no me he atrevido es a salir de copillas antes de la prueba......je, je.....
...Aunque Javi, crea otra cosa. Si Javi, tengo que desmentirte, no sea que alguien haga una locura. Durante la boda solo tomé el vino, y poco mas... la mayoría eran refrescos sin aliñar. Ays! Lástima de barra libre.
Así que no hubo doping.
Muchas gracias ALberto. Te acuerdas cuando unas pocas vueltas corriendo alrededor de la casa de las monjas nos hacían echar los pulmones??
UNos poquillos de años atrás na mas.
Dani, envidia me vas a dar tu, cuando te hagas finisher en Lanzarote. Gracias.
Robert, muchas gracias. Tus comentarios me hicieron tomarle el respeto debido y necesario a la prueba, cuando la preparaba.
Si Sr. ENHORABUENA y FELICIDADES!!!
Bueno, ahora una felicitación de alguien que más que "máquina" es un "maquinillas" solamente; porque yo no sé lo que son 42 kms uno detrás del otro, pero me lo imagino, ¡y por eso te aplaudo!
¡NO DEJES DE DISFRUTARLO!... porque las grandes gestas son como los diamantes: para siempre.
¡¡¡¡ FELICIDADES !!!!
Ya te di la enhorabuena en persona, y ahora la desplazo a aquí.
Yo, que cada vez hago menos deporte (espero cambiar la tendencia) no entiendo esa capacidad de superación que tienes.
Para mí la maratón era algo que corría gente que yo no conozco y que está algo loca.
Ahora ya conozco a alguien que sí ha corrido una maratón.
Lo que no me queda tan claro es si estoy en un error si sigo pensando que es algo para gente que está algo loca...
Felicidades fenómeno, eres un ejemplo para demostrar que los retos se van cumpliendo, con ilusion y entrega, animo y a por lo q te propongas¡¡¡
Enhorabuena!!
Acabo de leer tu comentario en mi blog. Si puedes acercate al CAR de la Cartuja del 3 al 8 de mayo, el campeonato del mundo de aguas abiertas promete mucho!
un saludo!
Muchas felicidades Jesús, me alegro muchísimo por tí. Y a la vez, siento una envidia terrible, yo quiero sentir eso, yo quiero sufrir esos 42km.
Espero algún día poder decir como tú que soy un maratoniano, aunque no sé cuando será e incluso si llegará.
Bueno, un abrazo muy fuerte máquina, tío grande.
Pues si Jesus, con constancia y fe, se consigue todo. Ya lo has comprobado. Precioso dia que tardará en borrarse de tu memoria. Imagina un Im, dura como poco 3 veces lo que un maraton, vamos una vida. Sigue que si lo intentas también llegaras a esa meta.
Muchas gracias Talín y Xarli. Ahí ando disfrutándolo.
Pues sí Gon, no lo dudes, como escribía aquí hace un par de semanas. Loco, loco.
Lo peor de conseguir un reto, es que al poco tiempo hace falta otro...
Y eso, Emilio, que no nos falten retos (Muchas gracias).
Suerte, Elena, y a seguir. Pasaré, pasaré por el CAR.
Muchas gracias, Alex. Ya verás, como en poco Maratoniano también. Zaragoza es un buen sitio para ese estreno ¿no?. Un abrazo.
Gracias Gazapo. Si creo que tardaré en olvidarlo, y no tardaré demasiado en ir engordando el sueño de un IM.
Buena foto la del kilometro 21 chaval
Saludos y Felicidades
1dek
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